UN SUEÑO QUE SE CONVIRTIO EN MUJER

 De entre las brumas de mis sueños
apareciste tú, la mujer con quien soñaba
tu musical y dulce voz dijo mi nombre
y yo supe que Dios te enviaba a mí
porque el ya sabía que te amaba.








Yo estoy seguro que hace ya mil vidas que te amo
Y aunque para amarte, ni mil vidas son bastantes,
sé que el buen Dios me ha concedido
llegar hasta esta edad para encontrarte
y todo el resto de esta vida para amarte

Tal vez es la mayor locura de mi vida
pero te siento tan mía y tan amada
que estoy convencido de que somos
dos mitades de un alma dividida
dos lenguas de una misma llamarada
dos latidos de un mismo corazón.

Tú eres la musa que dio a luz a mis poemas
y eres la sangre roja, tierna, apasionada
que corre como un río por mis venas;
Eres la luz con que comienzo cada día,
mi alimento, mi aliento y mi ambrosía
Tal vez el día de hoy eres ajena
Pero finalmente serás mía.

No hay comentarios: