Cuanta veces se detiene el alma pensando que hemos llegado a nuestra meta
Cuanta veces hemos creído encontrar la paz en el lago azul de una mirada
cuantas otras confundimos los cantos de sirena con los cantos del amor
cuantos llantos derramados por el rompimiento cruel de una promesa
cuanta gente caminando a duras penas por la senda del dolor
Hay veces en que sueño llegando al final de mi camino
y en ese sueño azul tu siempre estás conmigo
en lo alto de una cumbre pongo la bandera del destino
una rodilla doblada y mi mano sincera y extendida
para todo aquel que se sienta o quiera ser mi amigo
El universo entero sigue andando derramando su luz y su negrura
indiferente a los problemas de la cada vez más corrompida humanidad
y nosotros sin saber a donde vamos agachamos la cerviz y caminamos
buscando en nosotros esa herencia de virtud y de bondad
que parece perdida en los confines irreales de la nada
y que Dios nos la devuelve cuando llegamos nuevamente
a nuestra eterna e inevitable sepultura.
Cuanta veces hemos creído encontrar la paz en el lago azul de una mirada
cuantas otras confundimos los cantos de sirena con los cantos del amor
cuantos llantos derramados por el rompimiento cruel de una promesa
cuanta gente caminando a duras penas por la senda del dolor
Hay veces en que sueño llegando al final de mi camino
y en ese sueño azul tu siempre estás conmigo
en lo alto de una cumbre pongo la bandera del destino
una rodilla doblada y mi mano sincera y extendida
para todo aquel que se sienta o quiera ser mi amigo
El universo entero sigue andando derramando su luz y su negrura
indiferente a los problemas de la cada vez más corrompida humanidad
y nosotros sin saber a donde vamos agachamos la cerviz y caminamos
buscando en nosotros esa herencia de virtud y de bondad
que parece perdida en los confines irreales de la nada
y que Dios nos la devuelve cuando llegamos nuevamente
a nuestra eterna e inevitable sepultura.
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