Hoy es el día del hombre
y aunque me place ser parte de ese género
aún no sé porque estoy aquí ni lo que espero.
Amé, me amaron, fallé y también fui traicionado
pero hoy que reincido y vuelvo a estar enamorado
pienso, pienso y que esto a nadie asombre;
Eso de que somos los reyes de este mundo
en verdad no es cierto, es sólo el nombre,
y la verdadera soberana es la mujer
porque el hombre nada es sin su querer.
Es con una mujer que tocamos el cielo con las manos
y no existe hombre que por una mujer no haya llorado.
Un poeta dice en unos versos muy humanos
que son borrados de la lista allá en el cielo
los que en su vida, a una mujer, nunca han amado.
Por eso al felicitar hoy toda la especie masculina
Hago extensiva mi felicitación a la mujer
porque macho y hembra fueron hechos
como dos mitades de la voluntad divina
solos pueden vivir, pero no plenos,
en cambio juntos nada iguala su poder.
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